El post de hoy es muy especial porque hablo por primera vez de Ximena, nuestra bolita peluda. Ella es tan importante en casa como nosotros por lo tanto la cuidamos mucho e intentamos que esté lo más feliz posible.
Ha sido desde que nació una gata muy rutinaria, y solo quería una clase de pienso. Le ofrecimos muchas marcas y tipos pero no los aceptaba.
Cuando Purina nos propuso hacer el reto de Purina One Bifensis durante cuatro semanas, no lo dudé ni un segundo, pero sabía también que sería un reto para mí porque llevaba 6 años sin conseguir que Ximena probara otro tipo de comida.
Para mi mayor sorpresa y en casa nos quedamos alucinados porque desde el primer día que integramos la comida se la comió sin pensar.
Eso me llenó de alegría porque podía mejorar su alimentación y por lo tanto calidad de vida.
Me encanta porque hay infinidad de tipos de comida para elegir. Nosotros probamos una especial para gatos no esterilizados y otra para pelaje y bolas de pelo, ya que Ximena tiene mucho pelo y necesita una ayuda extra para poder digerir los pelos que se traga al limpiarse.
Tengo que contaros que se trata de un producto en seco con una composición nutricional que tiene bacterias beneficiosas funcionales y todos los nutrientes claves que el gato puede necesitar, incluyendo ácidos grasos Omega 6. Su fórmula de defensa dual funciona en paralelo con el interior, ayudando a mantener la producción natural de anticuerpos del gato, y en el exterior manteniendo una piel saludable y un pelaje radiante y por supuesto lo que más me gustó es que no tiene colorantes, ni aromatizantes, ni conservantes artificiales añadidos.
En estas 4 semanas he notado una notable mejoría en su pelaje, no se le enreda tanto el pelo y lo tiene más suave con brillo y sedoso. Y lo más importante de todo es que percibo que está mas contenta, solo hay que escuchar como ronronea al comer.
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Así que a todos los que tenéis en casa a un peludo, os lo recomiendo totalmente, nosotros estamos felices de poder cambiar y progresar en la alimentación de Ximena.
Aprovecho este post para describiros como ha sido la relación de Ximena con Mario desde que nació, ya que muchas de vosotras me preguntaís porque estaís embarazadas y sentís curiosidad y esperanza de que sea una relación buena.
Ximena supo desde el primer momento de que estaba embarazada, dormía cerca de mi al principio y conforme mi barriga iba creciendo empezó a dormir encima de ella. Sabia que estaba Mario dentro y era una forma de protegerlo.
Lo que hicimos es que cuando Mario nació y estábamos en el hospital le llevamos un pañal para que se fuera haciendo con los olores y la nueva persona que ya formaba parte de nuestra familia en casa.
Cuando Mario era muy pequeñito se limitaba a descansar junto a el. Y mientras dormía, lo olía, y velaba por el.
Incluso mientras le daba el pecho en el cojín de lactancia, ella se subía y era para verme con mi hijo e hija peluda encima.
Mario fue creciendo y poco a poco se fueron conociendo, aceptando y queriendo.
Ahora mismo Mario la busca, no para de jugar con ella y aunque ella es mayor sé que le gusta que alguien le vaya detrás. Está pendiente de el, si llora va corriendo a ver que le pasa, y por supuesto sigue durmiendo con nosotros.
No hay nada mejor que nuestros hijos se crien con animales, tiene muchos beneficios y favorece en muchos aspectos como a fortalecer el sistema inmunológico de los niños, tener menos alergias, problemas respiratorios, etc. y por supuesto les permitirá tener una estimulación continua, y sobretodo el adquirir el amor y respeto por los animales.
Ximena te queremos, gracias por estar en nuestra vidas y llenarlas de alegría.
Gracias por leerme y por estar ahí.
Bravo!!!!����������������������������❤
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